El sistema de la moda

Roland Barthes propone un análisis semiológico del sistema de la moda.  Su análisis se “limita” a la Moda escrita (“o, para ser más exactos, descrita”). “El objeto del análisis no es, por lo tanto, una simple nomenclatura, sino un verdadero código, aunque ese código no sea más que “hablado”, este trabajo no verse ni sobre el vestido ni sobre en lenguaje, sino en cierto modo, sobre la “traducción” del uno al otro”.

El vestido de moda es complejo pone en juego varias sustancias: la materia, la fotografía, el lenguaje se queda con la transformación de un objeto en lenguaje.

 Se trata de detectar en un mensaje simple – la descripción de un vestido a la moda- la superposición de varios sistemas de sentidos: por una parte, eso que podríamos llamar “código vestimentario”, que reglamenta un determinado número de usos y por otra parte, la retórica, es decir, el modo en que la revista expresa ese código y que por su parte remite a una cierta visión del mundo, a una ideología. El análisis semiológico permite determinar el lugar de la ideología en el sistema general de sentido.

Un enunciado de Moda implica al menos dos sistemas de información: uno propiamente lingüístico (la lengua francesa para él) y un sistema “vestimentario” según el cual el vestido (los estampados, el accesorio, la falda plisada, un top sin mangas, etc.) significa ya el mundo (las carreras, la primavera, la madurez), ya la Moda. Estos dos sistemas no están separados: el lingüístico parece tomar a su cargo al vestimentario.

Contrariamente al mito de la improvisación, del capricho, de la fantasía, de la creación libre, uno se da cuenta de que la moda está estrictamente codificada. Es una combinatoria que posee una reserva finita de elementos y reglas de transformación, cada año se recurre al conjunto de rasgos con sus propias restricciones y reglas, como la gramática. Si la moda nos parece imprevisible es porque nos situamos en el plano de la reducida memoria humana. En cuanto aumentamos su dimensión histórica encontramos una regularidad muy profunda.

Para Barthes, hay 2 modas: “Por una parte, la moda se esfuerza en trazar correspondencias entre el vestido descrito u unos usos, unos caracteres, unas estaciones, unas funciones: Un vestido para la noche, para ir de compras, para  la primavera, para las estudiantes, para las jóvenes desenfadadas. En este caso la arbitrariedad de la moda se elude y enmascara bajo ese léxico racionalista, naturalista. La moda miente. Se oculta detrás de coartadas sociales o psicológicas.

Por otra parte, existe otra visión de la moda consistente en renunciar a este sistema de equivalencia y edificar una función propiamente abstracta o poética. Es una ociosa, lujosa, pero que tiene el mérito de declararse como una forma pura. Se trata de un vacío que no es absurdo, un vacío que se construye como un sentido.

Referencias:

Gabriela Pedranti. (2013). Barthes y el sistema de la moda. 2016, de Prezi Sitio web: https://prezi.com/vnsy4updhdbg/barthes-y-el-sistema-de-la-moda/